¡Buenas tardes ritmiquer@s y feliz año!
Ya os he comentado por redes sociales que últimamente estoy más liada que de costumbre, por lo que no puedo subir tantas entradas como me gustaría, os pido disculpas para empezar.
Y como dejamos atrás 2015 y estaréis cansados ya de ver lo mejor de este año que nos ha dejado, he deicidio empezar 2016 hablando de una de las grandes volviendo a la sección Mitos de la Rítmica.
Tom Theobald
Esta cara no engaña, seguro que ya sabéis el nombre de nuestra protagonista … ¡Eugenia Kanaeva!
Kanaeva nació en 1990 en Omsk (Unión Soviética) y con seis añitos ya estaba pisando los primeros tapices, no era de extrañar, su madre también fue gimnasta y su abuela patinadora profesional y amante de este deporte.
Con 12 años ya hizo su primera prueba en Moscú que la llevo al Colegio de Reserva Olímpica y un año más tarde en Japón se proclamaba Campeona del Mundo Junior.
Empezó a trabajar en el centro de alto rendimiento de Novogorsk y con 17 años, y de casualidad, debutó en el Campeonato de Europa de Bakú (Azarbayán). Alina Kabaeva, de la que también hemos hablado en este blog (https://ellugardelaritmica.wordpress.com/2014/01/15/leyenda-de-flexibilidad-y-galardones-infinitos/), sufrió una lesión en el tobillo que brindó la oportunidad a Eugenia de pisar el tapiz de Bakú en la rotación de cinta. ¿El resultado?, medalla de oro pese a haber conocido su inscripción en la competición con un día de antelación.
Poco a poco fue haciéndose un hueco entre los grandes nombres de la época. En 2008 ganó todos los Grand Prix y Copas del Mundo. Como colofón ese año se proclamó campeona de Europa en Turín (Italia).
Como no podría ser de otra manera fue convocada para representar a Rusia en los Juegos de Olímpicos de Pekín. Allí se hacía con su primera medalla olímpica a más de tres puntos Inna Zhukova, de la que también hemos hablado por aquí (https://ellugardelaritmica.wordpress.com/2015/01/22/de-cosaco-en-cosaco-hasta-la-medalla-olimpica/).
Os dejo su ejercicio de aro únicamente, porque de ella hay mucho que contar.
Llegamos a 2009, año en el que se hizo con los cuatro oros del Europeo de Bakú.Su nota más alta fue en cuerda. (Con todos estos ejercicios podréis ver porqué me quejo de que la escuela rusa podría evolucionar en algunos movimientos y eligiendo músicas …)
También en este año se colgaba el oro del Mundial de Mie (Japón) a título individual, pero también en cada una de las rotaciones y por equipos, lo que supuso un récord jamás alcanzado antes.
Repitió hazaña en 2010 ganando todos los Grand Prix y Copas del Mundo. Además, volvió a proclamarse campeona de Europa en Bremen (Alemania) y del Mundo en Moscú (Rusia). Por poner alguna pega en esta competición no se clasificó en la rotación de cinta por un fallo.
En 2011 siguió ganándolo todo, aunque falló en el Campeonato de Europa de Minsk (Bielorrusia) sólo consiguió el oro de pelota y aro, sin embargo en el Mundial de Montpellier (Francia) volvió a batir su propio récord ganando todos los oros, tanto por equipos, como por individual.
Y de nuevo año Olímpico. En 2012, ganó otras muchas medallas, pero nos quedamos con esta que vio peligrar en el primer día de clasificación por esto.
Aún así supo reponerse para convertirse en bicampeona olímpica.
Os dejo el resto de sus ejercicios de Londres para que disfrutéis 😉
Tentada por conseguir su tercera medalla olímpica contempló la posibilidad de continuar hasta los Juegos que nos ocuparán este año ¿os imagináis un duelo Kanaeva – Kudryavtseva?, me hubiera encantado, pero la experiencia dice que mantener ese nivel de competición es complicado y prefirió poner fin a su carrera por todo lo alto. Aquí puso su punto y final a la competición, pero continúa ligada a la rítmica, y es que en ese mismo momento se incorporó a la Federación Rusa de Gimnasia como Vicepresidenta.
Como curiosidad y para cerrar esta magnífica historia, contaros que tras las Olimpiadas de Londres su novio le pidió matrimonio y como no podía ser de otra forma, su vestido de novia iba plagado de Swaroskys. 😛
Espero que os haya gustado, ¡nos vemos pronto!
¡Un abrazo ritmiquer@s!
El lugar de la rítmica 